miércoles, 1 de mayo de 2013

Nómades Kids 3: Ministerio de Desarrollo Animal



En este artículo se mostrará, a partir de la utilización didáctica de una analogía del mundo animal, la interacción entre la política  animal del BAP y el desamparado instinto libertino de la calle.



1-     En el día del canino trabajador, un asistente social perruno se encuentra descansando en los pasillos del Rawson (centro operativo BAP) para intervenir en la calle y asi enfrentar con más energía la miseria del mundo animal.

2-     Mientras tanto en los frondosos parques del Rawson (hectáreas codiciadas por los inescrupulosos negocios inmobiliarios del macrismo), unos gatitos necesitados han sido abanadonados por algún humano desalmado.


3-     A fuera de los límites ex Hospital Rawson (del que antes era un prestigioso hospital escuela y ahora es un depósito de parásitos de la gestión macrista y el grupo de choque de Sutegba),

 unos perros de la calle exhiben el acto sexual descaradamente atentando contra las buenas costumbres de la normalidad animal. Un vecino camaleón pita el silbado y convoca a los canes adiestrados.

4-     El asistente social perruno escucha el silbato y teniendo en cuenta el dicho que dice: “en casa de herrero cuchillo de palo” deja los gatitos agonizantes a su suerte en los frondosos y reevaluados parques del Rawson y se alista para limpiar la calle de la inmoralidad perruna.

5-     Se acerca para llenar un informe social y reestablecer el orden como buen asistente social perruno.

6-     Los perros de la calle lo echan al grito de: "salí de acá perro viejo", para seguir con su acto libertino y dejan dibujado al asistente social perruno.

7-     Mientras tanto, los gatitos mórbidos se despiertan porque que tienen hambre y reclaman en el Ministerio de Desarrollo Animal, lugar donde habían sido abandonados.

8-     El asistente social perruno, al escuchar el reclamo de los gatitos desamparados y sumada la impotencia que le produjo el haber sido dibujado por unos pulgosos perros en situación de calle, se recuesta en los pasillos del Rawson, centro de operaciones BAP, para recargar la energía necesaria para los siguientes 364 días que le restan de un año repleto de trabajo animal.

                                                                
                                               Fin


                                                                      El Rufián